Una familia de color disfrutando de un pícnic con alimentos saludablesSi padece una enfermedad cardíaca, mantenerse al día con las vacunas recomendadas es tan importante para su salud como seguir una dieta saludable y hacer ejercicio de forma regular.

Las personas con enfermedades cardíacas y antecedentes de accidentes cerebrovasculares tienen un riesgo elevado de sufrir complicaciones graves por ciertas enfermedades que pueden prevenirse con vacunas.

Contraer COVID-19, influenza (gripe), neumonía o el virus respiratorio sincitial (VRS) puede aumentar la probabilidad de sufrir un infarto o un accidente cerebrovascular. Estas enfermedades pueden provocar inflamación, lo que aumenta el riesgo de formación de coágulos sanguíneos y obstrucción de arterias en personas con enfermedades cardíacas.

Las enfermedades cardíacas pueden comprometer la capacidad del cuerpo para combatir enfermedades y aumentar el riesgo de complicaciones graves en ciertas enfermedades.

Además, las enfermedades que afectan la respiración o causan fiebre alta pueden ejercer una presión adicional sobre el corazón.


¿Qué vacunas se recomiendan para proteger la salud de las personas con enfermedades cardíacas?

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan las siguientes vacunas para las personas con enfermedades cardíacas:

COVID-19

Es importante que todas las personas mayores de 6 meses estén al día con las vacunas contra el COVID-19.

Un estudio reveló que las personas con COVID-19 tenían de 3 a 8 veces más probabilidades de experimentar un ataque cardíaco y de 3 a 7 veces más probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular. Además, otras investigaciones demostraron que las personas que están vacunadas contra el COVID-19 tienen menos probabilidades de sufrir un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.

A pesar de que algunas vacunas contra el COVID-19 han sido asociadas con casos raros de miocarditis y pericarditis, la American Heart Association (AHA) afirma que los beneficios de vacunarse contra el COVID-19 son mucho mayores que los riesgos.

Gripe (influenza)

Todas las personas mayores de 6 meses deben vacunarse contra la gripe todos los años.

Las personas con enfermedades cardíacas tienen 6 veces más probabilidades de sufrir un ataque cardíaco dentro de una semana después de contraer la gripe. Por lo tanto, para estas personas, vacunarse anualmente contra la gripe es tan importante como controlar la presión arterial y tomar estatinas para regular el colesterol.

Lea más sobre la gripe en personas con enfermedades cardíacas

Enfermedad neumocócica

La enfermedad neumocócica es provocada por bacterias que pueden afectar diversas partes del cuerpo y causar afecciones como neumonía (infección pulmonar), bacteriemia (infección de la sangre) y meningitis (infección de las meninges y la médula espinal).

Las personas con enfermedades cardíacas tienen un mayor riesgo de ser hospitalizadas e incluso de morir por complicaciones de la enfermedad neumocócica.

La vacunación antineumocócica se recomienda para los siguientes grupos:

  • niños menores de 5 años;
  • adultos mayores de 50 años;
  • personas con ciertas afecciones crónicas u otros factores de riesgo

Obtenga más información sobre la enfermedad neumocócica en personas con enfermedades crónicas

Virus respiratorio sincitial (VRS)

El virus respiratorio sincitial (VRS) es un patógeno común que afecta el sistema respiratorio, lo que incluye la nariz, la garganta, los pulmones y las vías respiratorias. A pesar de que suele manifestarse con síntomas leves, similares a los del resfriado común, el VRS puede representar un riesgo severo para bebés, niños pequeños y adultos mayores, y ocasionar enfermedades graves que requieren hospitalización.

Según investigaciones, alrededor del 20 % de los adultos hospitalizados por VRS sufren problemas de salud como ataques cardíacos e insuficiencia cardíaca.

La vacuna contra el VRS se recomienda para todos los adultos mayores de 75 años, los adultos de 60 a 74 años que tienen ciertos factores de riesgo, incluidas las enfermedades cardíacas crónicas, y las mujeres embarazadas para proteger a sus bebés. Para los bebés nacidos de madres que no recibieron la vacuna contra el VRS durante el embarazo, se recomienda un anticuerpo monoclonal para el bebé.  

Si tiene una enfermedad cardíaca, hable con un profesional de la salud sobre la posibilidad de vacunarse contra el VRS.

Tétanos, difteria y tosferina

Se recomienda que todas las personas mayores de 2 meses se vacunen contra el tétanos, la difteria y la tosferina (pertussis) La mayoría de los bebés reciben una vacuna combinada llamada DTaP (difteria, tétanos y tosferina acelular). Asimismo, los adultos, los niños mayores y los adolescentes deben recibir un refuerzo de la vacuna combinada, Tdap (tétanos, difteria y tosferina acelular) o Td (tétanos y difteria), cada 10 años. Además, las mujeres embarazadas deben recibir una dosis de la vacuna Tdap durante cada embarazo.

Estas vacunas ofrecen protección contra 3 enfermedades potencialmente graves:

  • El tétanos provoca espasmos musculares intensos que pueden resultar en el "bloqueo" de la mandíbula, lo que dificulta abrir la boca o tragar. En casos graves, las infecciones por tétanos pueden provocar la muerte.
  • La difteria puede causar problemas respiratorios, insuficiencia cardíaca, parálisis y, en ocasiones, la muerte
  • La tosferina puede provocar ataques de tos tan intensos que dificultan la respiración, el sueño o la alimentación

Vacunación

Consulte con un profesional de la salud de confianza sobre las vacunas recomendadas. Si su proveedor de atención médica no le ofrece las vacunas necesarias, pida una derivación para asegurarse de recibir todas las dosis recomendadas para usted.

 

Actualizado en octubre de 2024

Fuentes: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, American Heart Association