La historia de Joseph (gripe)

Mi hijo, Joseph, era un niño sano de cinco años cuya historia comenzó de manera bastante inocente, con un resfriado y tos. Poco tiempo después, comenzó a estar letárgico y a tener dificultades para respirar. Llamamos a nuestro pediatra y lo llevamos al centro de urgencias local, donde se dieron cuenta de que sus niveles de oxígeno en sangre eran muy bajos. Lo derivaron al hospital infantil local, donde en principio le diagnosticaron neumonía e iniciaron el tratamiento correspondiente. Varios días después, le diagnosticaron gripe H1N1.

Joseph estuvo en el hospital durante un total de 10 días y su estado nunca fue crítico, excepto en las últimas ocho horas previas a su muerte. En ese momento, la presión arterial de Joseph se desplomó y regresamos a la unidad de cuidados intensivos, donde los médicos realizaron una serie de pruebas. Unas horas más tarde, los médicos decidieron conectarlo a un respirador para que se sintiera más cómodo porque su respiración y frecuencia cardíaca eran muy altas. A pesar de su estado, Joseph estaba alerta y receptivo. Estábamos hablando de disfraces de Halloween, cuando, de repente, Joseph perdió el conocimiento. A pesar de los esfuerzos por salvarle la vida, Joseph falleció ese día debido a complicaciones de la gripe H1N1.

Es común escuchar "es solo una gripe", pero puedo asegurar que la gripe es una enfermedad grave que se cobra la vida de miles de personas cada año en los Estados Unidos, incluidos más de 100 niños. La gripe no discrimina. Como padre, le recomiendo que vacune a todos sus familiares todos los años.

Serese Marotta
Madre de Joseph
Springboro, OH

Fuente: www.familiesfightingflu.org.